Reapareció Simone Biles.
Se terminó la gimnasia artística en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020. En el último día de finales individuales por aparato, la República Popular China hizo el 1-2 en el podio de la barra de equilibrio femenil. Chechen Guan se colgó el oro, Xijing Tang obtuvo la presea plateada y en uno de los regresos más esperados de la justa de verano, Simone Biles de los Estados Unidos se llevó el bronce.
La competencia definitiva de la viga de equilibrio femenina en el Centro de Gimnasia de Ariake rápidamente tomó el rumbo que se mantendría hasta el final. En el segundo turno de la tarde, Xijing Tang se presentó con autoridad y con una calificación de 14.233, se puso en la punta de la tabla.
Una entrada después, una de las historias más comentadas y polémicas de los Juegos Olímpicos tuvo un cierre por demás digno. Biles entró al duelo decisivo después de abandonar la final por equipos del 27 de julio pasado y ausentarse voluntariamente de las finales individuales a las que había clasificado por priorizar el cuidado de su salud mental.
La gimnasta nacida en Columbus, Ohio, mostró la calidad que la he hecho medallista olímpica y campeona mundial y con una puntuación de 14.000, alcanzó un segundo puesto que hizo vibrar a todo el pueblo norteamericano.
Cuando todo apuntaba a que el podio estaba definido con la canadiense Elsabeth Black en el tercer lugar, la segunda representante de la República Popular China, Chenchen Guan, cerró la competencia con una rutina que rozó con la perfección. La calificación de 14.633 le otorgó directamente el primer puesto y con ello, la medalla de oro que terminó con la gimnasia olímpica femenil de Tokio.
Los puntajes que completaron la lista final fueron: Elsabeth Black (CAN)- 13.866, Sunisa Lee (USA)- 13.866, Urara Ashikawa (JPN)- 13.733, Flavia Saraiva (BRA)- 13.133 y Vladislava Urazova (ROC) 12.733.