El equipo inglés arrancó con el pie derecho ante un rival que solo se había enfrentado en finales de Champions.
En la jornada 1 de la UEFA Champions League y en actividad del Grupo B, Liverpool vino de atrás para vencer 3-2 al AC Milan en un encuentro donde los italianos sorprendieron al remontar en pocos minutos antes del medio tiempo y que terminó por resolver los “Reds” con su estilo de juego con muchos disparos.
La primera mitad arrancó con un dominio del equipo inglés, al minuto 9´ con un autogol de Tomori pusieron el 1-0, ocasionado por un remate de Alexander-Arnold que terminó por ser rechazado hacia la portería por el defensor inglés y poniéndose en ventaja muy temprano.
En el 13´ Liverpool tuvo un penal a favor para ponerse 2-0 arriba, pero fue atajado por el arquero del Milán, Maignan, al tirarse al costado izquierdo, evitó que Mohamed Salah anotara y ampliara el marcador para los locales.
Cuando los dirigidos por Jürgen Klopp estaban encima en el encuentro, al 42´ Ante Rebic anotó el 1-1 al rematar dentro del área con colocación al poste lejano y después de culminar una triangulación que habilitó para dejar al atacante mano a mano frente al arquero.
En los primeros minutos del segundo tiempo, al 48´ Salah anotó el gol del empate 2-2, tras definir por abajo del arquero luego de una buena pared con Divock Origi que dejó al egipcio a modo para conseguir la anotación que los volvió a meter en el partido.