- Se vivió gran ambiente en la Plaza de Toros México.
Roger Federer ganó The Greatest Match contra Alexander Zverev, en parciales de 3-6, 6-4 y 6-2 desde la Plaza de Toros México .
Aunque lamentó no asistir al Abierto de Acapulco, Federer prometió regresar para dar un partido de exhibición en ese destino turístico u otra ciudad del país.
“No volverán a pasar 23 años para que regrese a México, eso se los aseguro, son personas grandiosas que aman en tenis, a los niños les digo que entrenen duro, sean amables y escuchen a su entrenador. Este partido fue increíble y nunca lo olvidaré Viva México”, exclamó el suizo.
Durante el encuentro se escucharon gritos de “te amo Roger”, “soy tu fan Roger”. La plaza de toros nunca tuvo un minuto de silencio, situación que no molestó a los jugadores, al contrario, actuaron en complicidad con la gente.
Roger bailó al ritmo de la música, interactuó con el público, hizo dominadas con la pelota como si fuera balón de futbol y hasta regaló su raqueta a solicitud de un niño en
las gradas.
La mayoría de sus tiros ganadores los consiguió en ataques a la red. La velocidad en su servicio estuvo por debajo de los 180km/hr y cometió errores no forzados, pero mostró pasión en el encuentro, dejando satisfechos a los aficionados.
Alexander alcanzó más de 200km/hr en su saque con aces, sin embargo, marcó doble falta en varias ocasiones, situación que aprovechó el suizo para sacar ventaja en el tercer set.
Desde el inicio del calentamiento, Federer salió con su playera verde en honor al público mexicano, mientras que Alexander Zverev utilizó una camiseta negra de la Selección Mexicana de Futbol y uno llamativos zapatos en homenaje a la cultura de nuestro país con imágenes en color dorado.
Como reconocimiento, ambos recibieron un árbol de la vida esculpido en plata y sombreros charros.
Al partido acudieron 42 mil 517 personas, rompiendo el récord establecido en el duelo de exhibición entre Kim Clijsters y Serena Williams, disputado en Bruselas en junio de 2010, que fue de 35,681 espectadores.
NOTA: MARTHA PALMAS MONTES