Chicago sumó su tercer triunfo del año, a pesar de la lesión de su QB: Mitchell Trubisky.
Demostraron una vez más los Osos de Chicago, que el fuerte del equipo es la defensiva y es cómo podrá competir en la División Norte de la Conferencia Nacional. Esta tarde, en casa vencieron 16-6 a los Vikings que no pudieron mover el ovoide ni por aire ni por tierra.
El juego parecía que sería una pesadilla para Chicago al lesionarse en las primeras jugadas del partido, Mitchell Trubisky por un golpe en el hombro y tuviera que abandonar el juego. Pero desde la banca vino Chase Daniels y respondió al dar pase de touchdown en la primera serie ofensiva. Encontró en las diagonales a Tarik Cohen en envío para 10 yardas y ponerse al frente en el partido.
Tras esto, las defensivas se impusieron en toda la primera mitad, pero los que dieron el golpe para marcar mayor diferencia en el juego fueron los “Monsters of Midway” al quitarle el balón a Steffon Diggs. Aprovechó el turnover Chicago para tomar ventaja de doble dígito. Eddie Piñeiro conectó gol de campo de 25 yds para irse con ventaja de diez puntos al descanso.
Siguió fuerte la defensa de los locales y en la primera jugada del tercer cuarto, hubo fumble que recuperaron. Chicago convirtió en puntos esta jugada al conectar Piñeiro su segundo gol de campo del juego, siendo éste de 38 yardas. Cerca de finalizar el tercer cuarto, Piñeiro volvería a acertar un Field Goal, ahora de 30 yds y tomar ventaja de tres posesiones con 15 minutos por jugar.
Fue hasta el último cuarto que los Vikings pudieron ponerse en el marcador. Dalvin Cook con acarreo de dos yardas puso el marcador (6-16), ya que Minnesota buscó los dos puntos extra, pero falló. Ante la urgencia del cronómetro y buscar empatar el juego, aprovechó la defensa de el local para parar el ataque vikingo y sentenciar la victoria para su causa.
Con esta victoria, Chicago está compartiendo el liderato del Norte de la Conferencia Nacional con Green Bay y entierra en el fondo de dicha división a Minnesota con récord de (2-2).