- El partido se aplazaría un par de meses debido a los incidentes en la Ciudad Condal.
No es ninguna novedad que la situación política que se vive en la ciudad de Barcelona es bastante complicada. Ahora ese tema, se ha trasladado al futbol. El primer Clásico de la temporada, que se debería disputar el 26 de octubre, cambiaría de fecha por el delicado tema político. La nueva fecha sería el 18 de diciembre. Cabe resaltar que según varios reportes, ni Barcelona ni Real Madrid estarían contentos con esta decisión.
El Presidente de la Generalitat de Catalunya, Michel Buch, aseguró que la policía autónoma catalana, los Mossos de Esquadra, pueden garantizar la seguridad del público durante el partido. La policía de la república ha preferido no emitir comentario alguno sobre estas declaraciones.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, señaló para la radio: “La importancia de que la ciudad trate de actuar con la máxima normalidad posible, y que se desarrollen todas las actividades previstas, como el Barça-Madrid, si se puede garantizar la seguridad“.
El siguiente tema fue la recalendarización. Ni Real Madrid ni el Barça quisieron invertir localías, es decir que se jugara el 26 de octubre pero en el Santiago Bernabéu. Así, quedaban dos fechas disponibles para ambos clubes, el 4 y el 18 de diciembre. El 4 fue rechazado por los culés, ya que tres días antes visitan al Atlético de Madrid y consideran una gran desventaja enfrentarlos de manera seguida en tan poco tiempo. Habrá que esperar noticias, ambos clubes han mandado sus inconformidades a la liga y están a la espera de una respuesta.