Ter Stegen fue la figura de la noche por parte de los españoles.
Con un autogol polémico, Barcelona doblegó por dos goles a uno al Slavia de Praga en la tercera fecha de la fase de grupos en la UEFA Champions League.
Un primer tiempo parejo en el tema de posesión del esférico, aunque la estrella blaugrana, Lionel Messi, sorprendió con un tanto de vestidor y puso el marcador a favor de los catalanes de cara al descanso.
En la segunda mitad, los errores en la defensa comenzaron a notarse en la defensa azulgrana y al 49′, la capital checa explotó en júbilo cuando en un trazo desde el medio campo, Jan Boril aprovechó un servicio entrando a la media luna y definió pegado a la parte inferior del poste izquierdo de Marc- André Ter Stegen.
Más tarde, Peter Olayinka metió un cubetazo de agua fría a todo un inmueble, luego de un remate polémico de Luis Suárez que culminó por empujar el mismo futbolista del Slavia a propia puerta y sentenciar la victoria blaugrana en Praga.