Ante la campaña suscitada para eliminar el grito homofóbico en los estadios de futbol, la Federación Mexicana de Futbol (FMF) se unió con la CONAPRED en busca de erradicar el grito por parte de los aficionados.
Los altos mandos del balompié nacional acordaron un convenio con el fin de no ser sancionados por la FIFA, que abarca desde la detención del partido, duelo a puerta cerrada o la exclusión de la Copa del Mundo.
Durante la firma de lo pactado, el secretario general de la FEMEXFUT, Iñigo Riestra, junto con la directora de la CONAPRED, Alexandra Haas, mencionaron que el futbol debe forjar un respeto como sociedad y trabajarán lo mejor posible para evadir temas de discriminación.
“Conscientes de la responsabilidad que implican los reflectores del futbol y de la importancia de capitalizarlos en beneficio de la sociedad firmaremos un convenio de colaboración con la CONAPRED”, señaló Riestra.
Al mismo tiempo, se le preguntó sobre la sanción que recibió el técnico del América, Miguel Herrera, sobre el insulto que propinó al silbante Marco Antonio Ortiz. Expresó que la suspensión estuvo acorde al reglamento, pese a que especialistas pidieron un castigo más fuerte.
La primera prueba se dio la semana pasada en el juego amistoso entre México y Trinidad y Tobago, desde el Estadio Nemesio Diez. Sin embargo, la afición hizo caso omiso y se esperan sanciones severas si no se cumple con el reglamento.